Tarde para arrepentirse

"Una burguesía sin buenos modales"

Un vestido de novia es el pretexto para reunir a tres mujeres, tres amigas que se conocen desde hace 17 años.

Antonella, una escritora cuyo marido fue asesinado y que no encuentra inspiración alguna para sus letras y en una situación económica deplorable.

Abby, una mujer cuya aspiración es ser esposa, madre y ama de casa.

Angela, licenciada en turismo, es una mujer con una carrera política prometedora, en una situación económica muy por encima de sus amigas, quienes la califican de frívola, incapaz de sentir compasión por alguien.

La historia comienza con una llamada telefónica de Abby, quién después de varios intentos parece que encontró al famoso "Príncipe azul" y va a casarse, ahora viene la etapa soñada de toda mujer (toda mujer que sueñe con una boda), la elección del vestido de novia.

Y es que algo tan esperado sólo se puede compartir con las mejores amigas, las cómplices, las que saben todos tus secretos, las que te acompañan en tu menarca, las que ríen, las que lloran, las que te abrazan en tus días más tristes, en fin, tus hermanas.

Sin embargo este vestido tras sus hilos blancos y su simpleza empieza a sacar el carácter de cada una de ellas, su verdadera esencia y sus pensamientos para con las otras.

¿Qué es un vestido de novia? Para Abby, la oportunidad de ser todo aquello que siempre soñó, quizás para lo que fue educada, "la mujer de", para Antonella el recuerdo del marido ausente, los sueños arrebatados, el adiós que nunca llegó, para Angela, quizás una simple transacción de beneficios mutuos entre las partes.

Y es el vestido una mera excusa para sacar lo peor de cada una de ellas, lo que su nivel social y educación no les permite mostrar, es momento de tirar las caretas.

Había un slogan hace muchos años de una obra de teatro: "Entre mujeres podemos despedazarnos pero jamás nos haremos daño" y entre este círculo de amigas, al parecer es lo que ha venido sucediendo desde hace tiempo, pero un vestido, un "chistoso" vestido, desatará la tercera guerra mundial.

Con un tono cómico, las actrices Estefanía Ahumada, Ana Cortí y Anahí Dávila nos muestran la decadencia de las relaciones humanas y la fragilidad de la amistad, bajo la dirección de Alan Blasco.

"Tarde para arrepentirse" se presenta los martes a las 20:30 hrs en el Círculo Teatral, ubicado en Veracruz n° 107, Col. Condesa, hasta el 6 de junio.

¿Duermen los peces?

¿Qué hay después de la muerte?... es la premisa con la que arranca ¿Duermen los peces?, Jette, una niña de diez años nos va narrando lo que sucede con su hermano Emilio de seis años, quien tiene cáncer.

Muchas veces decimos o pensamos que para los niños es más fácil procesar los temas del duelo y las despedidas, pero realmente ¿qué es lo que pasa por sus cabezas? ¿Cómo viven ellos esta fase?...

Jette nos presenta el mundo de sus padres tras la perdida de Emilio y como tienen que continuar con su vida, su cotidiano, la escuela, el trabajo, la familia, con un sin fin de preguntas para que ella misma pueda entender por qué ya no jugará con su hermano o por qué a veces los días son grises.

Un trabajo escénico que nos lleva en una montaña rusa de emociones, la risa por la complicidad de los hermanos, las travesuras y por la inocencia de Jette, el llanto porque dejar ir no siempre es fácil, en especial cuando ya no se podrá abrazar, besar o decir un "te quiero".

En el programa de mano dice: "es una obra que te toca el corazón", creo que te toca todo tu ser, el corazón, el espíritu,  todo, pues en algún momento todos nos hemos preguntado si hay dolor después de morir, si morir es como un sueño largo, eterno... en algún momento todos tenemos preguntas y no siempre entendemos las respuestas.

Lo cierto y como bien dicen en el montaje, es que todos vamos para allá, todos tendremos que morir algún día.

Con la interpretación de Adriana Reséndiz quien hace un estupendo papel y que en todo momento nos lleva de la mano en este viaje tan emotivo y significativo, bajo la dirección y sensibilidad de Aracelia Guerrero y la dramaturgia de Jens Raschke. 

La escenografía de Patricia Gutiérrez Arriaga (miembro del Sistema Nacional de Creadores de Arte) merece una mención especial, pues en todo momento es acogedora y nos lleva a diferentes ambientes, lugares y situaciones.

"¿Duermen los peces?" se presenta hasta el 30 de abril en el Circulo Teatral, ubicado en Veracruz n° 107 de la Colonia Condesa, los domingos a las 13 hrs.